HISTORIA JUEGOS OLÍMPICOS

LOS JJOO Y LA PARTICIPACIÓN ARGENTINA 

(Capítulo III)

AMSTERDAM 1928

En Ámsterdam vuelven a participar los países prohibidos como consecuencia de la Primera Guerra Mundial. Se instauró que Grecia abra el desfile de las delegaciones, por haber sido el organizador de los primeros Juegos, y que lo cierre el anfitrión. Atletas de 28 países -incluidos los asiáticos en esta oportunidad- obtuvieron medallas de oro. Es un récord que se extiende hasta México ’68. 

Por primera vez, las mujeres compitieron en atletismo y gimnasia estableciendo récords mundiales en todas las pruebas. Alemania fue readmitida como participante. Participaron 3.014 deportistas (2.724 hombres y 290 mujeres) de 46 países que compiten en 109 eventos. 

La delegación nacional compuesta por 101 deportistas volvió, otra vez, a embarcarse rumbo a Europa con los sueños olímpicos renovados. Argentina inscribió a deportistas en las competencias de atletismo, boxeo, ciclismo, esgrima, fútbol, equitación, lucha, natación, deportes de invierno, pesas, remo y yatching. Lo curioso esta vez fue que, para poder realizar una buena preparación final, el buque a vapor “Andes” que llevó a los argentinos desembarcó en Ámsterdam un mes y medio antes del inicio de los Juegos.

Los resultados vuelven a ser satisfactorios para el deporte argentino: se obtienen siete medallas por primera vez. Si se tiene en cuenta que en dos presentaciones ya se habían conquistado 13 preseas, el panorama era alentador. Las máximas alegrías las trajo el boxeo y la natación. La historia particular es la del boxeador Víctor Avendaño que logró el oro entre los medio-pesados. Su presencia había estado en duda luego de haber obtenido un permiso especial para participar y correr el riesgo de no hacerlo, por ser un soldado conscripto que no podía representar a la Argentina en competencias deportivas. Cuatro rivales sucumbieron al poder de sus puños hasta que llegó el 11 de agosto, cuando venció por puntos al alemán Ernst Pistulla. Avendaño se transformó así en el primer campeón olímpico individual argentino.

Arturo Rodríguez Jurado es un nombre que también entró en la historia olímpica argentina al obtener la medalla dorada en la categoría pesado. Su triunfo tuvo sabor a hazaña. En su segunda y última participación en los Juegos, Rodríguez Jurado fue el de talla más pequeña de todos los boxeadores de su categoría. Tres contendientes quedaron en el camino, uno de ellos por knock out, hasta llegar a la final frente al sueco Nils Ramm. El “Mono” subió al ring a pegar sin pensar y al finalizar el primer round, el sueco tenía su cara toda ensangrentada y ambos ojos cerrados. El árbitro no dudó en declarar campeón olímpico al argentino. Años más tarde, Rodríguez Jurado se dedicaría al rugby, donde llegó a ser capitán del seleccionado nacional. 

La tercera medalla de oro de estos Juegos llegó de la mano del nadador Alberto Zorrilla, luego de ganar los 400 metros libres y establecer nuevo récord mundial. Zorrilla había sufrido pleuresía a los siete años, una enfermedad temible en ese entonces, y para recuperarse su médico le recomendó que hiciera natación. A los 18 años, en París 1924, se había quedado en las puertas de las finales de los 100 y 400 metros libres. Pero a Ámsterdam llegó con toda su potencia vigente para dar el gran golpe. En la final, el duelo estaba dado entre el sueco Arne Borg y el australiano Andrew Charlton. En el andarivel número 6 aparecía Zorrilla. Borg se retrasó en la largada, y Charlton entabló una lucha con el estadounidense Clarence Crabbe. Faltando 25 metros, Zorrilla se acerca a los líderes y terminó pasándolos. El público no entendía nada. Ese 9 de agosto, el argentino sorprendió al mundo deportivo. 

Tres medallas de plata y una de bronce completaron la actuación argentina en estos Juegos. La de bronce es para el equipo de florete compuesto por Roberto Larraz, Raúl Antaguzzi, Luis y Héctor Luchetti, Camilo Caret y Oscar Viñas. Raúl Landini consiguió la de plata en la categoría welter de boxeo, al igual que Víctor Peralta -a quien perjudican en la pelea por el oro frente al holandés Lambertus van Klaveren- en pluma. El otro segundo lugar fue para fútbol. Era el momento de mostrarse ante el mundo: por primera vez, Argentina participó con este deporte en los Juegos Olímpicos. Argentina y Uruguay disputaron la final por la medalla de oro. Hizo falta jugar dos partidos porque el primero fue empate 1-1. Pero tres días después, Uruguay venció 2-1 y dejó al equipo albiceleste con la medalla de plata. En Ámsterdam 1928 comenzó la odisea por conseguir el máximo galardón en fútbol.