SEMIFINAL: PALMEIRAS 2-2 BOCA 
Boca otra vez fuerte en Brasil y habrá final histórica ante River

Por @JonyFabbian

DESDE SAN PABLO.- El Allianz Parque completo, colorido y con fuegos artificiales, fue el estadio en el que Boca entró al campo de juego con el objetivo de capitalizar los dos golazos de Darío Benedetto en la Bombonera, y sellar la clasificación a la final de la Libertadores. Y los dirigidos esta noche por Gustavo Barros Schelotto, aprobaron el examen demostrando el temperamento necesario para una noche de copa de éste nivel. Aunque tuvo algunos momentos tensos, finalizó el partido igualando 2-2 con otra mágica obra del Pipa Benedetto y jugará la final contra el rival de toda la vida: River. Podría marcarse hoy como la memorable noche en que se decretó la final argentina del torneo más importante por éstos lados del mundo.


Si bien Boca contaba con una ventaja importante, el partido tuvo pasajes vibrantes y con un Palmeiras agresivo en busca del descuento rápidamente. A los diez minutos, Bruno Henrique provocó el ruidoso festejo del público del Palmeiras con un gol que provocó preocupación en los argentinos. Pero en este caso el VAR sirvió para beneficio xeneize: una clara posición adelantada anterior anuló el festejo de los dirigidos por Luís Felipe Scolari.

Unos instantes después, el peligroso delantero colombiano Sebastián Villa recuperó una pelota en mediocampo, tiró una pared con Jara y desarticuló a la defensa brasilera para asistir a Wanchope, que con la efectividad que lo caracteriza, dejó tirado a Weverton y salió al abrazo de sus compañeros para festejar el 1 a 0. Ahora para quedar afuera del torneo, Palmeiras debía marcar 4 goles. Algo muy complicado ante un Boca que siempre se hace fuerte en Brasil.

En el complemento Boca demostró su experiencia copera y lo plasmó con uno de sus mejores partidos en la presente Libertadores. Un remate de Lucas Lima desde afuera del área hizo lucir a Rossi, con una tapada que despertó el aplauso de la tribuna boquense en el Allianz Parque. El arquero tuvo un actuación memorable en una instancia decisiva.

El empate para Palmeires vino mediante de Luan, que sirvió para que la noche de San Pablo tenga una vibración superior. Luego la infracción de Izquierdoz a Dudú dentro del área le dio al partido la cuota de suspenso necesaria para un espectáculo más atractivo. Penal y un partido que estaba asegurado para Boca, comenzaba a tomar un rumbo inesperado. Gustavo Gómez desde los doce pasos acertó y puso el 2-1 para el delirio de los paulistas.
Pero como en la Bombonera, el héroe de la serie apareció desde el banco y fue otra vez Darío Bendetto el que desató la euforia xeneize. El jugador que encaminó la semifinal, confeccionó una réplica del segundo tanto que había convertido ante su gente para volver a doblegar a un arquero que se estiró de la misma manera que en Buenos Aires. Fue otro golazo del Pipa el que selló la clasificación y Boca a la final.

La copa más deseada del continente se definirá con una superfinal histórica e inédita. Boca y River se enfrentarán en un duelo que promete escribir la página más memorable de la historia del fútbol argentino. Serán los días en los que se paralice el mundo detrás de una pelota.