SERGIO 'MARAVILLA' MARTÍNEZ “Voy a demostrar que estoy en condiciones para pelear por título mundial”
JONATAN FABBIAN
DESDE MADRID.- Paso a paso, pelea a pelea, Sergio “Maravilla” Martínez ajusta las piezas y el engranaje en su camino a volver a pelear por el título mundial de los medianos. El ex campeón mundial argentino viene cumpliendo los pasos y una preparación física asombrosa a sus 46 años. Maravilla enfrentará este jueves al británico Macaulay McGowan, buscando su cuarta victoria al hilo desde que volvió al ring en agosto de 2020.
En el camino del retorno venció por nocaut técnico en el séptimo al español José Miguel Fandiño, luego al finés Jussi Koivula en el noveno, ambas en Torrelavega, y al británico Brian Rose por decisión unánime, en una pelea más reñida en la Plaza de Toros de Valdemoro, al norte de Madrid.
En el hotel Hard Rock de la capital española donde se realizó el pesaje, las formalidades pasaron a un costado, para que una entrevista se transforme en una charla entre argentinos donde ‘Maravilla’ asevera: “Cuando me preguntan cómo estoy respondo que estoy diez puntos. Estoy diez puntos y en realidad es que me siento diez puntos. No puedo comparar con la época cuando era campeón del mundo. Ahí estaba diez sobre diez a nivel mundial. Hoy estoy diez sobre diez en el nivel en el que me muevo. Para rivales como McGowan, rivales como Rose (Brian, su anterior derrotado)… me encuentro diez puntos para contrincantes que están por debajo de lo que es el título mundial”.
Quien supo tener el cinturón de los medianos (CMB y OMB) y superwelter (CMB), tuvo que traspirar para dar el peso de 73 kilos o menos en la ceremonia del pesaje. En un primer intento, ‘Maravilla’ acusó 73,400 por lo que tuvo que meterse en el gimnasio quince minutos para perder calorías y al rato la báscula marcó 72,800, lo mismo que su rival en la velada programada en el WiZink Center techado de Madrid con capacidad para 20 mil personas. Un evento que pondrá en evidencia para que está el boxeador argentino en un futuro no muy lejano. “Para pelar por título mundial me faltaran dos o tres puntos, tampoco estoy tan lejos. El trabajo que hice para esta presentación fue de doce semanas formidables, durísimas e increíblemente productivas. Con un gran progreso en lo físico, lo mental y lo técnico. Hay una cuestión de experiencia que es maravillosa. Mi cabeza trabajando a la par de mi cuerpo y veo como va evolucionando. Es tremendo”. El ida y vuelta con Sergio continúa sobre aspectos más técnicos…
¿El avance que mencionas tiene qué ver con conectar golpes más potentes? ¿Y qué mas?
Entre otras cosas notó el progreso en conectar golpes más fuertes y saber cómo enfoco la energía en el punto de impacto. Cuando era campeón del mundo era excesivamente rápido: conectaba tres o cuatro golpes, los rivales no lo veían, algunos se caían y otros sentían los golpes. Hoy no me hace falta conectar tres o cuatro. Hoy con uno es suficiente.
Antes necesitaba moverme y despilfarraba muchísima energía. Hoy con dos movimientos ya encuentro el objetivo. Lo que hoy resumo en una acción, antes precisaba diez para lograrlo. Y eso me lo da la experiencia. La eficacia que tengo ahora es brutal. Hago mucho menos para conseguir lo mismo que antes.
¿Esa experiencia que nivela el paso de los años aunque se te ve en gran forma?
La verdad que me sorprendo como responde el cuerpo con la edad que tengo. Voy a cumplir 47 años en menos de un mes. Tengo rendimientos mejores que cuando tenía treinta y pico de años y era campeón del mundo.
¿En qué puntos lo notas?
La velocidad, combinaciones de manos. Voy más rápido mentalmente y lo veo con los sparrings. Lo notan mis entrenadores. Es impresionante como juega la experiencia… ya sabes lo que va a hacer el otro, sabes bloquear con mucha más facilidad, los movimientos son más armoniosos. Luchas menos con tu propio cuerpo para combinar todo… todo fluye.
¿Cuánto crees que falta para estar en competencia por el título?
Siento que estoy cada vez más cerca del nivel para un combate por el título mundial. Mañana lo tengo que fundir a este pibe…si quiero llegar con chances concretas a ser campeón mundial, McGowan no puede ser un rival de oposición. Tengo que demostrar que ya estoy en condiciones de empezar a pedir terreno para una pelea mundialista y estoy pisando fuerte.
¿Cuál es la idea del combate con McGowan? ¿Hacerla larga para sumar asaltos e intentar un nocaut más sobre el final?
El objetivo es hacer una pelea duradera, con el objetivo de noquear del octavo round en adelante. Me conviene eso, tener rodaje, diputar bastantes rounds… pero también me beneficia terminar el combate antes de tiempo, no llegar al décimo asalto.
Me siento muy bien, viviendo un momento espectacular. No me olvido jamás de que estaba retirado, era un tipo con una pierna lastimada y que estaba con parches de morfina… luego con corticoides para calmar los dolores… Y de repente estoy compitiendo, pidiendo terreno a los jóvenes: ¡Abran paso porque vengo yo! Entonces me siento maravilloso.
Estás disfrutando del proceso…
Una vez que dejé de boxear en 2014, aprendí a disfrutar el proceso de las cosas. Antes no lo disfrutaba, no vivía el proceso, pensaba constantemente en el combate siguiente. Ahora no, paso a paso. La derrota me hizo genial (fue noqueado por Miguel Coto en el décimo round), me permitió liberarme… una libertad que no tenía. El aprendizaje va más aferrado de la mano de la derrota. Obviamente ganar también enseña. Pero uno avanza más después de la derrota.
¿Qué necesitas para conseguir el objetivo de pelear por la corona?
Necesito tiempo y la oportunidad de volver a pelear por el título, porque de lo demás me encargo yo.