MEDALLA DE BRONCE EN MUNDIAL DE TAEKWONDO Lucas Guzmán se subió al podio en Manchester
En la mejor actuación de su carrera, el bonaerense ganó al medalla de bronce en el Mundial de Manchester 2019 y rompió una racha negativa de diez años sin podios nacionales en un Mundial de Teakwondo. En la categoría hasta 58kg, fue el primer podio en un torneo ecuménico para el experimentado deportista de 24 años oriundo de Merlo y el quinto en la historia argentina en esta disciplina.
En su recorrido al bronce en el XXIV Mundial de Taekwondo, el argentino venció a Jeff Maruno (Lesoto) por 25-5, Mikhal Artamonov (Rusia, subcampeón mundial) por 13-4, Yoham Cchang (Canadá) por 22-18 y luego doblegó por 11-10 a Hedi Neffati (Túnez), para asegurar medalla y meterse en semifinales. En la semi fue superado (4-13) por el surcoreano Jan Jung, bicampeón mundial.
“Es el logro más importante de mi carrera. Estuve cerca de conseguirlo en el Mundial de Rusia y ahora, después de volver a competir en mi categoría -ya que estuve peleando en la de hasta 68 kilos-, pude meterme entre los mejores del mundo”, afirmó tras su logro en Manchester.
El taekwondista bajó casi 10 kg para encarar un nuevo desafío en un peso (hasta 58 kg) donde su objetivo es lograr la puntuación que precisas clasificar a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.Tras este podio, sumó 43,2 puntos y aumenta su esperanza olímpicas.
En su destacada carrera ganó un bronce en los Juegos de la Juventud Singapur 2010, otro en los Panamericanos de Toronto 2015 y dos platas en los Campeonatos Panamericanos de Aguascalientes 2014 y Querétaro 2016. Pero en Manchester, Lucas Guzmán quebró un maleficio de una década en mundiales, cuando allá por el 2009 en Copenhague Mauro Crismanich también fue tercero.
Es la quinta medalla para el taekwondo argentino en 24 torneos ecuménicos. Antes lo hicieron Vanina Sánchez Berón, plata en Manila 1995, Mariela Valenzuela, bronce en Atenas 1991, Marina Agüero, bronce en Nueva York 1993, y la de Mauro Crismanich.
