Final Mundial de hockey s/patines: ARGENTINA 3 – ESPAÑA 4
ARGENTINA SUBCAMPEÓN,
ESPAÑA NUEVAMENTE EL VERDUGO
La Selección de hockey sobre patines volvió a estar otra vez en lo más alto en la competencia más importante: en la final. Aunque se perdió el último partido, la actuación del equipo argentino fue fantástica. Por tercera vez consecutiva en la final, perdiendo ante el mismo rival, pero honrando vestir la Celeste y blanca. Doblemente meritorio para un grupo de deportistas que no reciben ningún apoyo económico en nuestro país y permanecen vigentes en la élite mundial.
La Selección Argentina de hockey sobre patines perdió ante España por 4 a 3 en la final del Mundial Angola 2013, en un emocionante partido que coronó a los españoles por quinta vez en file y por tercera vez consecutiva venciendo a la albiceleste en el partido por el título. En un encuentro vibrante, los ibéricos fueron más incisivos en ataque ante un equipo argentino que se sustentó en peligrosos contraataques.
Fue una final espectacular, España ganaba 3-0 y a falta de poco más de dos minutos Argentina puso el 3-3, provocando la sorpresa de todo el estadio.
Una final que se repitió por sexta vez en los últimos ocho mundiales -tercera consecutiva-, la selección ibérica que dirige Carlos Feriche abrió el marcador con gol de Jordi Adroher y puso el 2-0 antes de llegar al descanso por medio de Jordi Bargalló. Argentina no hacía pie ante el peligroso poder ofensivo de la Selección Española, que se marcó el 3-0 en el medio del complemento, con otra contra que culminó Marc Gual.
Pero Argentina, cuatro vez campeón mundial, iba a vender cara la derrota, a base de orgullo y amor propio, la selección Celstes y blanca se fue con todo en busca de no irse con las manos vacías. Fue a través de Carlos Nicolía que se abrió la esperanza, el mismo que metió a la albiceleste en el partido decisivo con un gol de oro contra Portugal en semifinales. Así, el equipo argentino dirigido por Matías Pascual encontró respuestas y atacó desesperadamente contra el arco español, y llegó a empatar a falta de poco más de dos minutos con goles de Matías Platero y Darío Giménez.
Fue Pedro Gil el que marcó el definitivo 4-3 que dio a España su 16° título mundial, superando los 15 títulos de Portugal, y el quinto consecutivo. Algo que ninguna selección había logrado. Mientras Argentina sigue padeciendo a su verdugo España, ya que desde que en 1976 disputaron el título por primera vez, se enfrentaron en la final nueve oportunidades, con siete victorias para España y dos para Argentina.
Pese a la amargura, de una nueva final perdida, es obligatorio remarcar el honor y orgullo del plantel argentino, que con enorme esfuerzo y sin sustento que apoye al deporte en el país, sigue manteniendo la bandera Argentina en lo más alto del hockey sobre patines en el mundo.
